- EGO SVM SOL ASTIGITANVS -
Gouache y óleo sobre tabla
30 x 45 cm
Gouache y óleo sobre tabla
30 x 45 cm
Écija, la Ciudad del Sol y las torres, mantiene su vinculación con el Astro Rey desde sus primeras páginas de historia, cuando en la antiguedad y según cuenta la leyenda, consagraba un templo al Sol, por ser este quien vivifica con sus candentes rayos a todos los seres. Es por ello, que no solo hicieron los astigitanos, de dicho astro su principal emblema, sino que por antonomasia, llamarán más tarde a la ciudad "Civitas Solis".
Con la expansión del cristianismo a lo largo y ancho del orbe, los antiguos cultos solares dedicados al Sol Invictus son adoptados por la nueva religión, centralizando la antigua figura del Astro en Cristo, que viene a ser la luz verdadera que alumbra a todo hombre.
En esto se basa el autor para representar al Nazareno como una torre alta, que avanza entre tinieblas moradas sobre un mar de cardos y abrojos, pero que se levanta firme para sostener sobre su hombro los pecados de la humanidad que viene a redimir con su pasión.
De su divina testa emanan los candentes rayos que lo coronan y vivifican al pueblo astigitano que lo venera. Él es el Sol de Écija.
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